Cuando Ava Sanchez invita a un hombre a casa al que se quiere follar, lo único que tiene que hacer delante de él es mover su culazo con un poco de twerking para ponerle a tono. Sabe que con un par de minutos moviendo el trasero, incluso sin estar desnuda, puede conseguir que cualquier tío se empalme. Y así es como prepara a este cabrón para que la folle, que comienza metiéndole el pollón en la boca para que chupe y luego se la folla duro agarrando su culo. La metida final es con empujones a cuatro patas viendo ese enorme trasero que tiene la puta en primer plano.