A Brooke Haze que su hermano le meta la polla no le parece algo tan descabellado como seguro que se lo parece a muchas otras mujeres. La zorrita está caliente y aprovecha que los padres no están en casa para de forma imprevista saltar a la polla del tío y chupársela. Con su mirada le está diciendo que no solo quiere comerle la polla a su hermano, sino que la quiere sentir dentro. De repente se abre de piernas con ese coñito peludo delante de él y abre los labios para que la penetre. Ya cuando se la ha metido la zorra no deja de tocarse el coño y echan un polvazo que acaba con la guarra pegando unos buenos gemidos.