El novio de su hermana ha ido a pasar unos días a su casa y el tío le tiene echado el ojo a su chochito. Lo tiene tan joven, prieto y rosadito que el tío no puede parar de pensar en follársela. Cuando su novia se ha dormido se encuentra con la hermana y no tarda en manosearla y decirle que lleva tiempo soñando con follársela. La rubia es joven y tonta y no puede evitar la tentación de tener la enorme polla del negro dentro de ella, dándole una follada que la deja totalmente en éxtasis pensando en lo abierto que le ha quedado el coño y en todos los orgasmos que ha tenido.