Esta rubia es una latina muy puta que vive en España y que está pensando en follarse al inquilino que tiene en su casa. Cualquiera se querría follar a esta pedazo de guarra, así que cuando le tiende la trampa con cámara oculta no hay duda que el cabrón le acaba metiendo la polla. La muy perra le cabalga, se pone en posición de perrito y se deja follar bien duramente tal y como la cerda estaba deseando. Luego le invita a que se corra en sus grandes tetas mientras ella le mira a los ojos para no perderse un detalle de la corrida.