La familia se ha ido a pasar el fin de semana a la playa y mientras el marido está disfrutando de un baño en la playa, la mujer y su hijastro se quedan en las toallas en la arena. La muy zorra está cachonda y se tira encima de la polla de su hijastro, chupándosela mientras le sonríe y le mira a la cara. La mamada no es suficiente, por lo que la muy puta se sube encima del rabo del chaval y se lo comienza a follar con un vicio tremendo. Cabalga un buen rato sin que el marido se entere de nada y el hijastro se termina corriendo en su culo.