Hay algunas zorras que por dinero harían lo que fuera, en especial si las pillas en un momento en el que están hambrientas de polla. Es lo que le pasa a Natalia Nix, a la que paran desde una furgoneta para ofrecerle que se monte con ellos dentro, que le chupe la polla a uno de ellos y que folle con él mientras la graban. Le prometen pagarle una buena tarifa por el polvazo y el tío se la folla bestialmente, pero después cuando ya le ha dejado el coño rojo la echan del vehículo y la abandonan sin darle ni un duro.