A esta negra la habían llamado para un casting en el que intentaba convertirse en modelo profesional posando para una revista. Pero cuando llega a la entrevista le dicen que, en realidad, no están buscando ese tipo de modelo. Lo que quiere la empresa son chicas a las que se puedan follar mientras las graban y que así puedan intentar convertirse en actrices porno amateur. La guarra acepta la oferta porque necesita dinero y el hombre blanco del casting se la folla bien duramente, la pone a cuatro patas y la revienta sin parar. La penetra duro mientras la agarra del cuello y la manosea de una forma violenta.