Para que les dé un contrato fijo estas becarias están dispuestas a hacer lo que sea con su jefe. El hombre es un viejales que está claro que no tiene sexo hace mucho, por lo que cuando estas putas becarias se le tiran encima y le comienzan a comer la polla a dos bandas, el tío se derrite del gusto. Las tiene a huevo y sabe que se las va a follar a fondo. Primero comienza penetrando a la rubia, que es a la que más ganas tenía porque tiene cara de zorra. Y luego cambia y se pone a follar a la morena, turnándose entre coño y coño mientras ellas aprovechan al final para chupársela de nuevo.