La India es otro de esos países donde las mujeres son sumisas al máximo y no tienen ningún tipo de decisión ni de capacidad para imponerse ante los hombres. Así que si alguien les dice que se pongan a cuatro patas para dejarse follar, ellas tienen que obedecer, incluso si es su hermano el que la penetra. Eso es lo que le pasa a esta culona, que se tiene que poner en posición de perrito sometida con la cabeza en el suelo y los brazos estirados mientras su culazo queda en pompa para que la folle. El hermano se la mete y no para hasta que ya ha vaciado sus huevos dentro de ella y la ha dejado chorreando.