Su padre llegó a casa borracho la última noche y está durmiendo la mona. Eso lo ve la putita como una ocasión ideal para aprovecharse de él y cumplir su fantasía incestuosa. Se arrodilla a los pies de la cama del hombre y le comienza a hacer una mamada para ver si la polla se le despierta. En pocos minutos el padre, que sigue dormido, tiene el rabo bien duro. Se piensa que es su mujer la que se sube encima de la polla para follar, pero no sabe que en realidad es su hija. Solo al final cuando el hombre ya se corre, se da cuenta de que la puta de su hija se lo ha follado.